Oveja Negra

[ENTREVISTA] “La mayoría del pueblo colombiano quería la paz"


06 de octubre de 2016

Oveja Negra

Oveja Negra diálogo con el politólogo y analista internacional, Atilio Borón, sobre Colombia y el contexto regional.

Con la noticia fresca del plebiscito en Colombia, y el triunfo del NO al acuerdo entre las FARC y el gobierno nacional para construir una paz duradera, Oveja Negra diálogo con el politólogo y analista internacional, Atilio Borón, sobre Colombia y el contexto regional. En esta entrevista, se abordaron los puntos más sensibles y complejos de este proceso que lleva cuatro años de encuentros y búsqueda de consenso en la Habana. “Creo que la mayoría del pueblo colombiano quería la paz, quiere la paz. Pero ahí hubo un grandísimo problema de comunicación” así comienza esta charla sobre la coyuntura política de América Latina.   

¿Qué análisis haces del resultado del plebiscito en Colombia?

Creo que la mayoría del pueblo colombiano quería la paz, quiere la paz. Pero ahí hubo un grandísimo problema de comunicación, de cuál era el contenido de los acuerdos de la Habana. Lo que permitió que gente como Uribe, por ejemplo, tergiversaran por completo la información y dijeran que los acuerdos simplemente le daban impunidad a la comandancia guerrillera, e inclusive le ofrecían una representación política en el senado y la cámara de representantes.

La participación electoral fue apenas del 37%, o sea en números redondos, uno de cada tres colombianos salió a votar.

Hay que entender una cosa, en Colombia hubo dos acuerdos de paz: en los años 80 se hizo el acuerdo entre el M19 y el gobierno. Ese acuerdo tenía 4 páginas, un listado muy puntual de cinco o seis ítems y nada más. El que se firmo ahora tiene 296 páginas. Más de uno me ha dicho que más que un acuerdo es un tratado. Es un tratado de derecho humanitario, altamente elaborado, donde participaron algunos juristas latinoamericanos de renombre, es una cosa muy bien pensada pero eso no fue explicado a la población. Entonces viene Uribe, con todo el aparato mediático que lo apoya y todo el odio a las FARC, diciendo esto es una capitulación vergonzosa, es un premio a los asesinos y los criminales. Cuando en realidad este acuerdo contempla la creación de una justicia transicional, un fuero especial de la paz, formado por colombianos y un número de jueces internacionales, para revisar los crímenes atroces y aberrantes que se hubieran producido por parte de ambos lados. Porque la guerrilla no creo fuerzas comunes como sí lo hizo el gobierno. La guerrilla no incurrió en el delito gravísimo de los falsos positivos, que era eso de ir a buscar chicos pobres en las regiones más apartadas de Colombia, decirles que le iban a dar un trabajo y luego de eso le ponían un uniforme de la guerrilla, lo fusilaban y lo exhibían como éxito del combate contra las FARC. Eso es un crimen abominable. Entonces, en los tratados estaban contemplados, tanto los crímenes producidos por las FARC, que ellos reconocen que los produjeron, como el reconocimiento del gobierno y del presidente Santos de que había habido crímenes del lado gubernamental. Pero esto no se explicó, entonces la población quedó ahí, víctima de la manipulación informática y el resultado fue que, los que estaban por el NO, que son una minoría, salieran todos a votar. Y los que estaban por el SI, que eran una mayoría, salieran muy pocos. La participación electoral fue apenas del 37%, o sea en números redondos, uno de cada tres colombianos salió a votar, dos de cada tres se quedaron en su casa.  

Un error de cálculo gravísimo, es que Santos creía que iban a ganar cómodos.

También hubo una combinación de factores aleatorios, por ejemplo el huracán Matthew, que provocó muy mal tiempo en gran parte de Colombia, sobre todo en las zonas del norte (muy castigadas por la violencia) donde mayoritariamente la gente votaba por el SI, pero no fue a votar por estas condiciones climáticas adversas. Esto es el factor aleatorio. El otro factor es político. Un error de cálculo gravísimo, es que Santos creía que iban a ganar cómodos. Le garantizaron las encuestas, todas sin excepción, que ganaba el SI y fijate como termino. 

Un gran condicionamiento político en términos globales significó ese acuerdo. De hecho a EE.UU políticamente no le quedó otra que salir a convalidar el acuerdo, independientemente del juego del pentágono, la CIA y la DEA...

A todo eso te agrego un dato más. ¿Vos sabes que en las negociaciones de paz, en los últimos dos años, había un representante de la casa Blanca, del gobierno de los EE.UU? No estaban solo las FARC y el gobierno colombiano. Había un funcionario nombrado directamente por Obama para participar en las negociaciones de paz.

¿Quiénes son los grandes favorecidos de este triunfo del No en el plebiscito?

Yo creo que el gran favorecido, el gran vencedor es Uribe. Es el que se llevó la mejor porción del éxito. Después, algunos sectores de las fuerzas armadas que tampoco estaban muy convencidos de llegar a un acuerdo con la guerrilla. Sectores minoritarios te diría, porque la gran mayoría de los sectores, después de casi cuatro años de negociaciones, se habían dado cuenta que en 52 años no podían ganar.

Yo creo que el gran favorecido, el gran vencedor es Uribe. Es el que se llevó la mejor porción del éxito.

Lo tuvimos a Temer en Argentina. Pidieron junto a Macri flexibilizar el Mercosur y anduvieron apretando un poco a Venezuela. ¿Cómo ves la visita?

La veo como una medida desesperada de un presidente muy impopular. Fijate que el grado de aprobación de Temer en este momento es del 3% y el 5% según las últimas encuestas que vi. Así que no lo quiere nadie, ni los propios. Pero hay un hecho que es el deshilachamiento completo del PT. El partido de los trabajadores perdió la mitad de los concejales que tenía en las alcaldías brasileñas, una catástrofe. Perdió nada menos que la alcaldía de San Pablo, la mayor ciudad de América Latina y la perdió por paliza. Está muy complicada la cosa en Brasil. La hipótesis es que estos tipos van a tratar de quedarse a como dé lugar, apelando a todos los recursos imaginables. Por supuesto que el poder judicial en Brasil está jugando a favor de ellos, porque Temer es un tipo que está denunciado de haber recibido una coima de once millones de reales. Lo denunció el tipo que le dio la coima, Odebrecht.     

Perdida la calle, el rodaje de las instituciones te liquida cualquier gobierno con buenas intenciones.               

¿Pensas que el próximo objetivo es Venezuela?

Sí, lo que pasa es que ahí se tropiezan con una resistencia muy fuerte. Creo que ellos querían acabar con Venezuela antes que con Dilma. Pero encontraron mucha más resistencia que en Brasil. Maduro, con todos los problemas que tienen su gobierno y los errores, todavía tiene la calle, y Dilma no tiene nada. Por eso ella cayó y el presidente de Venezuela se mantiene. Hoy por hoy, el control de la calle es absolutamente esencial para garantizar la durabilidad de un gobierno de centro izquierda, progresista, reformista, como se le quiera llamar. Perdida la calle, el rodaje de las instituciones te liquida cualquier gobierno con buenas intenciones.               


      

   

 

 

 

 

             

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